sábado, 25 de agosto de 2012

Una felación atípica.

Os voy a contar una de esas cosas que siempre habríais querido hacer o que os hicieran y que nunca os habéis atrevido.

Ubicación: Dentro del coche de mi madre.
   - Conductora: mi madre. 
   - En el asiento del copiloto: mi abuela. 
   - Detrás del asiento del copiloto: mi ex.
   - Detrás de mi madre: yo. 

Íbamos tranquilamente de viaje en el coche, cuando me entró el sueño y decidí tumbarme echando mi cabeza sobre mi ex. Hasta ahí todo normal. Yo estaba adormilada mientras él hablaba con fluidez con mi madre. Entonces se apoderó de mí esa parte que sé que os tiene encandilados. 



Empecé a rozar con mi cabeza su pene. Él me apartaba. Y seguí hasta que se le puso muy dura y ya no se negaba a que siguiera. Le abrí el pantalón sin hacer ruido y le saqué la polla. En esa posición sabía que mi abuela no podía vernos porque estábamos justo detrás de ella y mi madre tenía que volverse hacia atrás para vernos, cosa que sabía que no era propio de ella, siendo que estaba conduciendo. Así que me acomodé tumbada mirando hacia él, de tal forma que aunque se hubiera vuelto mi madre, sólo hubiera visto mi cabeza, y empecé a lamer tímidamente su miembro. Ese día me supo más jugoso y delicioso que nunca. Supongo que la presión de que nos pillaran, me volvía loca de excitación. 
Él continuaba con la conversación con mi madre, pero cada vez hablaba menos y ella era la que iba dominando la conversación, porque yo que soy muy mala en ciertas ocasiones, convertía esos tímidos lametones en otros mucho más contundentes cuando le tocaba hablar a él. Yo veía que cada vez hablaba frases más cortas y que le costaba incluso respirar de la tensión que se suponía hablar con mi madre mientras yo se la estaba comiendo. Intentaba apartarme a veces con sus manos para poder hablar, pero yo chupaba aún con más ahínco.
Finalmente se corrió en mi boca, sin saber a donde mirar, ni como callarse y ni como disimular semejante orgasmo. Le miré con la boca llena y nos fundimos en un beso lleno de semen.


¿Quien dijo que los viajes son aburridos? ¡Haced lo que esté en vuestra boca para conseguir diversión!

6 comentarios:

  1. Que problema que mis padres no conduzcan. Yo lo hice un día de reunión familiar con más de 20 personas (niños incluidos) en casa, tiene su mérito, pero tu te llevas la palma. Me he puesto un poco perro leyéndolo. +1

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  2. Si te he puesto perro, es que lo estoy haciendo bien jaja
    Si te animas, cuéntanos esa historia u otra con todo lujo de detalles y nos lo mandas al correo del blog =)

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  3. Yo, como el Señor Choto, en casa con la familia, en una casa en la que, cuando estamos todos, hay que hacer turnos para dormir y en la que hay que pasar de habitación en habitación para poder ir a baños cocina etc... pero bueno, no es comparable a hacerlo en el mismo habitáculo.

    Luego está el sexo en la calle o en lugares públicos (calles, bibliotecas, baños...), pero eso, supongo, lo habremos hecho todos.

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  4. A mi de niña con el noviete de por entonces, cuando contábamos con 14/15 años, me bajó los pantalones en la avenida de mi barrio y me lo comió ahi mismo en la cristalera de una tienda de cuadros. Es de las pocas veces memorables.

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    1. ¿En serio? Joder, que placer. Y me has puesto tonto en 5 minutos jaja. La verdad, es que me molaría mucho hacer esto mismo.

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    2. Que bonito descubrir tu blog como lectura matutina de un jueves bastante Alterado en el despertar....

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