miércoles, 29 de enero de 2014

El voyeur inesperado.


Ya escribí una entrada sobre voyeurs hace un tiempo y que podéis ver aquí: Unos voyeurs inesperados

Pero el otro día viví una experiencia que da para otro post. 

Un amigo se compra coche, que si "te lo enseño",que si "te doy una vuelta...", las típicas excusas para FOLLAR.
Acabamos metidos con el coche nuevo en unos pinares, besándonos la boca y lo que no es la boca... 



Salimos del coche para estar más anchos y nos pasamos a los asientos de atrás, ya que fuera hacía demasiado frío para podernos quedar ahí. Lancé los zapatos fuera del coche y volvimos a lo nuestro...



Es cierto que follar en un coche no es todo lo cómodo que nos gustaría, pero peor es no follar... Cambiábamos de posturas para evitar clavarnos el enganches del cinturón, no clavarnos las malditas puertas con formas punzantes y además no perder alguna extremidad por debajo de los asientos traseros... Si lo habéis sufrido alguna vez, supongo que os sentís identificados.


Finalmente, y como siempre, acabé consiguiendo que nos pusiéramos como a mí más me gusta: Que el tío se siente y ponerme sentada, de rodillas, sobre él (¡Ojo-cuidado con los enganches de los cinturones! No lo avisaré más.)
Esta postura me encanta porque es de esas en las que consigo correrme en bucle, una y otra vez. Las ventanas del coche estaban cubiertas de vaho por completo. Yo ya me había corrido un par de veces, cuando de repente el tío me dice: "Hay un hombre mirando fuera". Yo no hice ni caso, seguía a mi marcha queriendo más orgasmos cuando el tío me aparta y me dice: "¡Que hay un chico aquí mismo!", así que decidí mirar a través del vaho y la oscuridad y el hombre estaba como a un metro del coche y alejándose tras oírnos hablar sobre él.
Según me dijo el tío, el voyeur estaba con la cara casi pegada a la ventanilla del coche observándonos fijamente con muy malas pintas. 



¡Y MIS ZAPATOS ESTABAN FUERA DEL COCHE! Pánico e hiperventilación. ¿Se habría llevado mis zapatos? Hubiera sido un buen castigo... pero cuando ya no se le veía por la ventana abrí la puerta del coche rápidamente y los rescaté.

Nunca dejéis cosas fuera del coche mientras folláis y poned los seguros del coche... Por lo que pueda pasar.
¡Qué mal rollito, chavales!



2 comentarios:

  1. Jajaja, muy grande. Yo no tengo ninguna historia tan inquietante, pero sí un par de "He oido algo... ¡Viene alguien! ¡Huyamos" y que luego no fuera nadie... mal, mal...

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  2. Cosas que dan emoción a un polvo, sobre todo si las omites y sigues follando :__)

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